domingo, 10 de diciembre de 2006

LA MUERTE DEL DICTADOR


10 de diciembre de 2006



Y murió. Cuando nadie creía en su estado de salud, Augusto José Ramón Pinochet Ugarte falleció un día 10 de diciembre de 2006.


Para mi familia, o para la mayoría de ellos, es una noticia que genera sentimientos encontrados. Pues aunque somos católicos, no era un personaje muy querido para nosotros. Y es por eso mismo, porque somos católicos, nunca aceptamos que el asesinato y robo se haya institucionalizado en su dictadura, más allá de los logros económicos que pudo haber generado.


Aunque el perdón debiera ser una premisa que rigiera nuestras vidas, la soberbia del dictador impidió tener un asomo de compasión a su estado de salud. Como cualquier chileno, esperabamos que la justicia hiciera lo suyo y que la muerte y desaparición de tanto compatriota no quedara impune. Sin embargo, lo que no hizo el hombre, lo hizo la intervención divina o la propia naturaleza (mal que mal tenía 91 años, superando la esperanza de vida de todo chileno)


Ahora se fue y ya no queda más nada. El país sigue tanto o más dividido que antes; los desaparecidos más desaparecidos que nunca (y con mayor razón si calla la voz más importante); y los familiares de torturados, muertos y desaparecidos sin ver un soplo de justicia.


Lo paradójico de su muerte se produce por dos hechos que concitan mi atención: 1) su deceso ocurre justo el día que se conmemora los derechos humanos y 2) fallece un 10/12, número que antecede y precede a la fecha fatal de nuesta nación: 11 de septiembre.


Espero que con su deceso, nuestro país entre realmente en una etapa de transición que vaya por el verdadero olvido. Que izquierdas y derechas ya no tengan como bandera de lucha la imagen del dictador, pues ya no es más que un cuerpo inerte que se convertirá en polvo. Polvo que puede interpretarse como soplo de vida (leáse el génesis) o desecho de un hombre de corazón de barro. Júzguelo usted.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

ola loleeeee soy tu hermana..aca aprovechando que la jose esta ZzZZZZ...bueno que mas que decir sobre la muerte de un dictador, aunque yo no existia en esa epoca ,si tengo los conocimientos para opinar ya que uno va aprendido de la historia y dile lo que le cuentan.
la unica opinion que tengo al respecto sobre esta muerte tan esperada para algunos es que ahora lo juzgara Dios por todos los actos que cometido en vida ,ya que no lo pudo hacer el hombre.


Feñitax

burtonbk dijo...

A mí, como lo dije en mi post, me da indiferencia y aquello es una sensación extraña después de haber convivido cercanamente con gente de ambos bandos, pero es lo que siento.
Anhelo justicia real, pero sinceramente creo que esto no está tan cerca, por tanto, se lo dejo a Dios.
Preciosa la jose, que Dios la bendiga.
salu2

Apuntes de un Tinterillo® dijo...

llegue aca por links de Burton y empece a escribir de un hipotetico funeral sin espaerar el resultado tan rapidamente

salu2, tinterillo

Anónimo dijo...

cambia el tema...
feñax!